ATIZA CL

¿Por qué soy del Real Madrid?

Para muchos, de mente estrecha, ser del Real Madrid es lo mas fácil. "Eres del Madrid porque siempre gana" "Eres del Madrid porque no tienes personalidad". Ser del Real Madrid es el sentimiento mas complicado en cuanto fútbol se refiere. Cada temporada hay un riesgo elevadísimo de fracaso y unas probabilidades muy reducidas de victoria. Todo lo que se sale de la perfección produce insatisfacción en sus seguidores.

La Copa de Europa eleva al máximo esas exigencias. Una competición sobre la que se cierne una maldición blanca que dura desde aquel gol de Zidane, el último Dios que piso el césped del estadio mas bello del mundo. Los "pequeños" detalles llevan lastrando al equipo en esta cita desde entonces. Malas gestiones de plantilla, rivales de risa que hacen los partidos de su vida, goles en contra desastrosos, ocasiones falladas, errores arbitrales que pasan inadvertidos, porque claro, no se puede quejar alguien del Madrid, acostumbrado a ganar y a que le ¿¿¿beneficien???.

Esta temporada, final en el Santiago Bernabéu 2010, año de la 10ª... Florentino hace un equipo a la altura, salvo algunos deslices, de las exigencias; con el mejor jugador del Mundo en su plantilla, con otro que parecía estar entre los 3 primeros, con dos delanteros a priori competentes, buena defensa, buena organización de equipo...

Pero llega el Lyon, un equipo ramplón, que hizo un partido de ida discreto, igual que el Madrid, partido que como quedó 1-0 pudo quedar 0-1 o una mezcla de ambos resultados. Tiran 4 veces a puerta, el Madrid tira 5. Mayor posesión visitante, que no mejor utilizada. Meten la única clara que tienen, que llamaremos clara porque termina en el mejor gol que vaya a meter ese tal Makoun en toda su existencia. El Madrid falla la única clara que tiene y el árbitro se come un penalty... Hasta ahí todo entra dentro de un guión medianamente normal, aunque calificado por los medios de prensa (madrileños) como un estrepitoso ridículo, vergüenza, etc, etc. Prensa que desde que tengo uso de razón ha provocado mas daño que beneficio al Madrid, ejerciendo una presión infame sobre los jugadores, manipulando la información en favor de los intereses de ciertas "vacas sagradas" que a la larga, han producido un cáncer irreparable en esta entidad. Porque todo en este equipo se magnifica, y ni unos días son tan buenos ni otros son tan malos, aunque sea lo que vende periódicos.

Llega la vuelta, llega la prensa, la ilusión, el convencimiento absoluto de que este equipo uno a uno debería meterle 4 o 5 a sus rivales. Pero vuelven las desgracias. Un partido que se pone de cara desde el minuto 6, que debe irse al descanso con 3-0 pero que se va con un peligroso 1-0. Y la 2ª parte, la historia de los últimos 6 años. Los jugadores se encojen y desaparecen del partido. El Lyon no hace nada del otro mundo, empuja un poquito, cuelga balones y empieza a mascar el gol. El árbitro perdona una expulsión cuando mas equilibrado está el partido... y llega la ocasión clara para el Lyon, que no se va fuera ni al palo, ni la salva Casillas, acaba en gol, sin tiempo para la reacción y se cierra otro capítulo del horror.

Cualesquiera 11 jugadores vestidos con la camiseta del Real Madrid hubieran hecho el mismo partido. No se puede echar de menos a nadie ni culpar al entrenador, al presidente... es una cuestión psicológica. Jugadores que días antes le meten en media hora 3 goles al Sevilla o le meten 6 al Villarreal (equipos mejores que él, desde hoy insoportable, Lyon) son incapaces de crear una sola ocasión en 45 minutos, cuando la presión se ha cebado con ellos. Están bloqueados y se convierten en una banda en los momentos decisivos, cuando tiemblan las piernas, al principio y al final de estas eliminatorias, las de Octavos.

Situación que me recuerda a nuestra amada selección. Muchos, muy entendidos en fútbol vosotros, diréis que España consiguió romper el muro de Cuartos porque tenía el mejor equipo de su historia. Yo, os voy a iluminar. España rompió ese muro por SUERTE. La cara o cruz de una tanda de penaltis que salió favorable, de que ese día no le dieran un puñetazo a uno y no pitaran penalty, de que no le metieran gol en tiempo de descuento... Eso decide estos colapsos y eso decidirá, Dios (que no Kaká) sabe cuándo, que el Madrid vuelva a pasar de Octavos. Ni CR, ni un brasileño en su cuesta abajo, ni una piara de holandeses, ni los que quieran traer...

Ahora, a los madridistas, solo nos queda otra profunda decepción, decepción no por caer otra vez en Octavos, si no porque se ve truncado el camino a esa ansiada final, que todos esperábamos ganar. Porque estaba en un marco inigualable. Y donde para otros la victoria es una posibilidad, en nosotros es una exigencia. Y donde la derrota es dolorosa, en nosotros es mortal. Porque soy inconformista, por eso soy del Real Madrid.

ATIZA CL SEMIFINALES