Crónicas Mundanas (Juanma Trueba)

Y ahora, el asunto. Me ha sorprendido que durante la presente semana una enorme cantidad de personas hayan comparado a Messi con Maradona, exaltados, sin duda, por la gran actuación del primero en Zaragoza. Mi impulso inicial ha sido pensar que quienes comparaban eran jóvenes que no habían visto jugar a Maradona, salvo en escuetos resúmenes, o tal vez adultos que en aquellos años dorados estuvieron secuestrados por las FARC, o perdidos en el desierto o, pudiera ser, que les ocupara entonces un viaje iniciático por la India. Sólo así puedo entender semejante tropelía. Maradona era un jugador tocado por los dioses y Messi es un gran futbolista, fabuloso si quieren, pero tan terrenal como los boniatos. O dicho de otro modo (y me copio del último chat): todo lo que hace Messi lo hacía Maradona silbando (y Mágico González, por cierto), mientras hay cosas que Maradona hacía que Messi no podrá intentar ni siquiera en sueños. Y esto que cuento se puede apreciar en Youtube, no hace falta irse muy lejos.
Está bien que el fútbol presuma de desmemoriado, pero lo que no se puede consentir es reinventar la historia, reducirla a la quincena anterior porque ni con el mes entero nos daría para sostener la tesis del Messi sobrehumano. Lo siento, pero esto me duele tanto como que me llamen ‘viejito fingidor ponedor de fotos retocadas’. Es como comparar a Jordan con Barkley, y si no utilizo a Kobe es porque este ha hecho una infinidad de cosas que ni alcanza con la vista el joven Messi. No es cuestión de sobrevalorar o infravalorar, ni de mezclar filias, fobias, madridismos o barcelonismos. Es cuestión de valorar en su justa medida. Y Messi es bueno, seguramente el mejor del momento. Pero todavía no le ata las botas a Di Stéfano, Pelé, Maradona, Puskas, Garrincha, Bobby Charlton, Beckenbauer, Platini, Zidane o Best. Messi es como Mágico, pero mejor documentado videográficamente y mucho más aburrido. El futbolista que quisieras tener en tu equipo, muy cierto. Pero, por favor, en el cielo juegan a otra cosa.